Una de las razones por la que decidimos abrir Libros de Guayama es que, en muchos casos (demasiados casos), la literatura caribeña se queda en las islas.
Dos años después del paso del huracán María, en la isla caribeña crece un movimiento autogestionado articulado a través de asambleas populares que implementan alternativas y luchan contra el poder colonial.